De seguro has leído o escuchado esta frase: “Aprende y disfruta el estar sola”
Actualizado: 21 dic 2022

Todo esto te lo dicen los psicólogos, terapistas, amistades y familiares, lo que ellos no saben es que sí, todo eso es cierto, pero sólo por un periodo de tiempo y en casos determinados, no funcionan en todas las circunstancias. Te explico: para una persona alegre, divertida, sociable y que aprecia la buena compañía le es muy difícil estar sola todos los días y cuando te digo todos los días es literal…!
Te cuento un poco lo que me sucedió a ver si con esto puedo expresar lo que intento decirte, por años amé ir sola: al cine, de viaje, hacer ejercicio, caminar un centro comercial, hacer Mercado, comprarme ropa, ver televisión o simplemente salir a comer, te parece raro ¿no? Pues la verdad para mi no lo es, era una persona tan segura de mi, que era feliz así, lo disfrutaba de verdad, pero al mismo tiempo tenia momentos en los que estaba rodeada de gente que “aparentaban” ser mis amigos o decían “disfrutar” mi compañía por lo que constantemente recibía invitaciones para salir y compartir, es decir, tenía también un poco de lo que se conoce como “vida social”.
De la noche a la mañana algo pasó, y así de repente todo el mundo desapareció. No juzgo a nadie, simplemente prefiero pensar que ha sido todo parte del flujo natural de la vida, el caso es que de la nada y por algún tiempo estuve realmente sola, mi teléfono no sonaba nunca, nadie escribía, nadie llamaba, nadie invitaba a salir, a nadie le preocupaba siquiera cómo estaba yo. Me tocó estar sola con mis pensamientos, enfrentarme a todo lo que me estaba ocurriendo sola, sin poder contarle a nadie, sin ayuda de nadie, algo así como un “yo con yo”.
Al principio pensé: “no importa, si al final de cuentas yo disfruto estar sola” pero no, no es cierto del todo, si disfruto estar sola “de vez en cuando” no todo el tiempo…
Te confieso que durante ese tiempo tuve sentimientos encontrados, un poco de ansiedad y depresión, en fin cualquier clase de pensamientos producidos por mi mente con base a percepciones y experiencias pasadas erróneas. Poco a poco todo fue pasando, eran etapas que llegaban y se iba conforme las iba enfrentando, asumiendo y viviendo.
En mi proceso de evolución comencé a documentarme sobre lo que me estaba ocurriendo y por todos lados donde leía sobre el tema me encontraba con frases como: “pide ayuda”, “escribe tu”, “llama tu”, bueno, lo que viene a algunos no les va a gustar, pero, puedo decir que lo intenté, traté de reencontrarme con viajas amistades, contactar familiares y contarles lo que me estaba pasando pero para serte muy sincera, fueron muy pocas personas las que de verdad demostraron algún interés, la mayoría sólo escribió por un corto periodo de tiempo, luego continuaron con su vida. Una de ellas me dijo: “busca actividades en donde conozcas nuevas personas y así te distraes” ¿en medio de una pandemia? ¿Es en serio? Pues déjame decirte que también lo intenté, si, a pesar de la pandemia, no fue fácil pero logré conocer a una que otra persona, al principio súper bien, pero cuando comienza la rutina pues todo va quedando en soledad nuevamente, si no escribes tu, los demás no lo hacen.
Durante ese periodo nunca ocurrió un bajón de autoestima o de inseguridad en lo que soy y lo que he logrado con esfuerzo y dedicación, jamás tuve malos pensamientos sobre quién era yo, ni dejé de ayudar tanto como podía a los demás. cada día me miraba al espejo y luego de agradecer por todo lo que tengo y he logrado, terminaba diciéndome: “eres buena, hermosa, exitosa, profesional, amable y amorosa, ¿que más se puede pedir?” Y me tiraba un beso. ¿Vanidad? No lo creo, yo lo veo más bien como una persona que se quiere a sí misma, que se valora y que de vez en cuando tiene derecho a decírselo. Luego con el tiempo me di cuenta que mi sentimiento de soledad no estaba ligado a falta de autoestima.
Al punto al que quiero llegar es el siguiente: no todos los que nos sentimos solos algunas vez en nuestras vidas significa que nos hace falta amor propio, porque no es así, yo me amo, disfruto estar sola, pero ¿hasta que punto el ser humano aguanta vivir en soledad eterna? Somos seres sociables y necesitamos de la compañía de otros para poder experimentar cosas diferentes, para disfrutar de la vida, para hablar de lo que nos pasa bueno o malo, para lo que sea en realidad.
No es que ya no quiera estar más nunca sola, no es que no quiera seguir viajando o yendo al cine sola, ¡no! es muy probable que lo quiera seguir haciendo. Lo que sí es definitivamente necesario es la compañía de los que te aman y no necesariamente tienen que estar presentes a tu lado “face to face” no! Con simples mensajes, llamadas improvisadas y demostraciones de que les importas es suficiente para que una persona pueda sentirse querida por otros.