Esta derrota fue mejor que cualquiera de las anteriores
Actualizado: 21 dic 2022

Sí, leíste bien, fue “mejor”, cualquier persona la hubiese catalogado de la “peor de todas las derrotas” ¡Yo, no!
Como resiliente trato de ver las cosas desde el lado positivo, me esfuerzo constantemente a reconocer cuál es la lección que debo aprender de las caídas o derrotas y reflexiono para no volver a cometer los mismos errores una y otra vez.
¿Cómo lo hago?
Nada fácil querida, realmente me ha costado vivir las mismas experiencias varias veces para darme cuenta de que algo debía cambiar en mí, algo debía mejorar y aprender.
Imagínate estar en la cumbre de tu vida laboral y personal y de repente, te quedas sin nada. Puff, se esfumaron esas dos cosas principales en tu vida, te quedaste con unos pocos ahorros y sin nadie a tu lado que te soporte emocionalmente, que te de un buen abrazo, sin alguien que te diga que no te preocupes que no te va a dejar caer.
En fin, imagina quedarte realmente como recién salida de la escuela o de la universidad…
Luego de un tiempo, comienzas a salir con alguien y encuentras un trabajo que, aunque no es el ideal, al menos cubre tus gastos, y en ese momento sientes que poco a poco todo vuelve a la normalidad, hasta ahí vamos bien ¿verdad?
Ok, luego despiertas sin nada, de nuevo…
De pronto, por aquello del ocio, comienzas a recordar tu historia desde mucho antes de llegar a la cumbre de tu vida y te das cuenta de que es la segunda vez que pasas por el mismo ciclo, exactamente el mismo! Solo que aún no has llegado a la cumbre, en teoría esa cumbre sería lo que sigue ahora, luego de esta caída.
¿Qué harías?
No se tú que harías, te puedo decir lo que yo hice, ese día en el que los recuerdos comenzaron a llegar como bloques pasando uno a uno rápidamente, me senté y lo primero que me dije fue: “no puede ser” “acabo de vivir exactamente lo mismo que hace unos 7 años atrás… ¿Qué es esto? ¿Qué alguien me explique?”
Lo siguiente que hice fue analizar cada uno de mis pasos, acciones y comportamiento desde esa primera vez hasta esta última, y ¿sabes qué descubrí? Que aunque con un poco de más madurez y de experiencia, mis acciones y comportamientos fueron muy parecidos en cada episodio.
En ese momento dije: “algo tengo que aprender, este patrón no se me va a repetir más!”
Es allí cuando pensé la frase que titula este post: “Esta derrota fue mejor que cualquiera de las anteriores”
Sí, porque aprendí a detectar el error cometido, como mejorarlo y además comprendí que debía valorarme mucho más como persona y como profesional.
Se que ya te lo he dicho en casi todos los post, pero quiero de verdad insistirte, TODO lo qué pasa es por una razón, TODO trae un aprendizaje, TODO es un proceso en el que la vida te va llevando únicamente para que avances al siguiente nivel.
Pareciera que la vida nos pide en cada situación sólo que analicemos, aprendamos y corrijamos, y créeme no es tan difícil de practicar.